¿La primera y última?
Hoy ha sido un caos...
Quizás sea por el aura de mal genio que tenía desde un principio. No lo sé, pero... Casi me vuelo un dedo.
Literal, estaba picando algunas verduras y de pronto simplente el cuchillo se deslizó por mi dedo como debía haberse deslizado por aquellas ramas mixtas que estaba cortando.
Y bueno, nada, vi mi piel abrirse en dos y una parte colgando.
Mentiría si les dijese que me dolió, porque realmente no fue así. Simplemente estaba sangrando y sangrando y sangrando...
Levanté el pedazo de piel y pude ver mi tejido tan vivo...
Sólo pensé: "Si ésto no me dolió en absoluto, ¿Por qué he pensado tanto en desgarrar mi maldita garganta después de todo?"
No lo entendí, pero es eso mismo, es que nunca me había hecho tal herida en el cuerpo.
Las cicatrices que llevo en mis piernas y parte de mi abdomen sólo son cortadas a relieve. He visto sangre en mi piel como unos rasguños muy fuerte, nada más, ni nada menos.
Y bien, hoy ha sido un caos, porque mis pensamientos volvieron, y mi mal genio, y no sé qué haré para detenerlos.
Tengo esta herida que no puedo ni tocar, porque realmente ahora sí que duele.
Y muchas otras mentales con las que pasan exactamente lo mismo.
Quizás sea por el aura de mal genio que tenía desde un principio. No lo sé, pero... Casi me vuelo un dedo.
Literal, estaba picando algunas verduras y de pronto simplente el cuchillo se deslizó por mi dedo como debía haberse deslizado por aquellas ramas mixtas que estaba cortando.
Y bueno, nada, vi mi piel abrirse en dos y una parte colgando.
Mentiría si les dijese que me dolió, porque realmente no fue así. Simplemente estaba sangrando y sangrando y sangrando...
Levanté el pedazo de piel y pude ver mi tejido tan vivo...
Sólo pensé: "Si ésto no me dolió en absoluto, ¿Por qué he pensado tanto en desgarrar mi maldita garganta después de todo?"
No lo entendí, pero es eso mismo, es que nunca me había hecho tal herida en el cuerpo.
Las cicatrices que llevo en mis piernas y parte de mi abdomen sólo son cortadas a relieve. He visto sangre en mi piel como unos rasguños muy fuerte, nada más, ni nada menos.
Y bien, hoy ha sido un caos, porque mis pensamientos volvieron, y mi mal genio, y no sé qué haré para detenerlos.
Tengo esta herida que no puedo ni tocar, porque realmente ahora sí que duele.
Y muchas otras mentales con las que pasan exactamente lo mismo.
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